Son once los candidatos que postulan al sillón presidencial y pretenden ganar este 10 de abril en las elecciones.
Luis Castañeda, Alejandro Toledo, Keiko Fujimori, Ollanta Humala, Pedro Pablo Kuczynki, Manuel Rodríguez, Rafael Belaunde, Ñique de la Puente, Juliana Reymer, Ricardo Noriega y Humberto Pinazo.
Dentro de este número tan amplio, sólo los seis primeros son los que están verdaderamente en el ruedo.
Entre dimes y diretes, entrevistas de medios de prensa, viajes continuos dentro del país, mitines, bailes exóticos con pobladores, degustación de comida típica, viven estos candidatos los últimos tres meses.
Como es de esperarse, cada uno debe de mostrar su lado amable y carismático, ¿pero qué con la cara oculta de cada uno de ellos?, pues tienen acciones que esconder, o actos que se les debe de reprochar.
Ha sido demostrado que Alejandro Toledo solventó vacaciones y fiestas privadas -con bastante whisky- con fondos públicos durante su periodo presidencial. Por otro lado, tiene una escasa autoridad. Su gobierno, fue el de los paros nacionales (transporte públicos, magisterio)
Por su parte, Luis Castañeda -y su círculo cercano- se ha visto envuelto en el escandoloso caso de Comunicore. Es un excelente constructor - no se puede negar- pero tiene poco conocimiento de politología, economía y gobierno además de su ya conocida falta de transparencia.
Keiko Fujimori es totalmente inconsecuente con sus actos. Cree que su padre es inocente de todos los cargos que se le imputan, su candidatura se base solamente en el apellido que lleva. Su "ideología" deja mucho que desear. Si tuviera todas las intenciones porque el país prospere no se hubiera ausentado tanto tiempo -tiene faltas por casi un año entero sumando los días-en su labor parlamentaria. Su entorno no representa más que a la larga dictadura que rodeó a su padre. Dice que financio sus estudios en el extranjero, pero queda la duda, pues al parecer estudió con el dinero de todos los peruanos.
Ollanta Humala, militar de carrera. Poco o nada preparado, propugna el famoso "nacionalismo" que sólo busca eliminar la inversión extranjera. Su política de estatizar total o parcialmente es débil y nociva, Se ha demostrado que tiene lazos con la dictadura del gobierno de Hugo Chávez, incluso se proclamaba que éste hubiese financiado su campaña política en la contienda por la presidencia en 2005.
Pedro Pablo Kuczynski es considerado como un aliado de las mineras. Pues, no se atrevería a exigirles mayores contribuciones al Estado.
Manuel Rodríguez Cuadros no tiene el carisma necesario para ser candidato a la presidencia. Tiene pendiente la polémica de haber habitado la residencia diplomática más cara de la historia republicana. Ha expuesto directamente su rechazo a los sectores más conservadores, por lo que se puede decir que no posee habilidad para trazar estrategias en ese sentido.
Y así, cada candidato político, tiene de que ser reprochado, por algún error que cometió en el pasado, su escasa preparación, sus ideas fuera de orden, etc.
A pesar de las limitaciones de cada uno, los peruanos no tendrán más que escoger a uno de estos candidatos.
